Amigos Lectores:
En distintas ocasiones y de muchas maneras he leído obras de este estilo, algunas obras como esta me gustan especialmente si están bien documentadas.
La obra tiene saltos temporales diversos que nos llevan desde un presente hasta diversos momentos de la historia. Se podría decir que son el alma de la historia, y su alma no vale nada sin ellos. no sólo eso, nos mueve a que investiguemos las referencias históricas, sin ellas la obra sería esclava de los lectores. Ahora bien, la autora nos habla a través de la novela, no la entrega, la hace reflejo de una posibilidad cho si esta fuese su hijo, y, cada lector, fuese su compañero. Se podría decir que en cierto sentido la obra es una impronta de la propia escritora, u reflejo de ella. Es us herencia, su legado al mundo, cho lo es aquello que buscan en la historia que nos cuenta en la obra.
La palabra es una fuerza poderosa que se dice capaz de sostener el universo. Yo, no losé. L o que si sé es que la palabra, los hechos y acontecimientos del pasado, como lo es también una profecía, son el eje central de una historia sublime, que se encumbra en las alturas, y, que llega al lector como un rayo luminoso que hiende la oscuridad de las más negras nubes.
Recomiendo su lectura pues es como un amanecer, como una luz que llega al lector dándole una visión nueva del mundo, o, al menos, una interesante lectura que lo deleitará.
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