Amigos lectores:
Algunos días parecen llenarse de rayos, truenos, centellas... Algunos días y algunas noches son tormentas perfectas que nos llevan a descubrir siempre cosas. En mi caso una de esas noches descubrí una serie de televisión y esa serie una saga literaria: la de Harry Dresden de Jim Butcher.
Como buzo con una escafandra me sumergí en esa erupción literaria de fantasía urbana. Me sorprendió así una obra con gran fuerza y que estimula la imaginación a través de las impresiones que dejan sus descripciones de lo visible y lo invisible, lo real y lo mágico, así como aquello oculto en el subconsciente del autor, del protagonista y del lector.
Me sorprendió la novela como el incendio del templo de Diana en Éfeso o el nacimiento de Alejandro Magno en tierras greco-macedonias.
Seré sincero, comencé la lectura con ese escepticismo filosófico que procede de la esclavitud literaria procedente de lecturas precedentes. Sin embargo, percibí esa excepcional maravilla de esa región situada entre el Don y el Danubio que me fue posible ver no hace mucho en un documental de televisión. Me atrajo ese juego que hay entre autor y lector propio de Maquiavelo. Además, no es como otras una novela que sea manifiestamente indefendible, más bien todo lo contrario.
Creo que hayáis o no visto la serie "Dresden" esta saga literaria puede ser del agrado de muchos de vosotros, comenzando por este libro: "Tormenta". Un libro que nos sitia cuál Caribdis y Escila pero en el buen sentido.
