Lectores:
En primer lugar disculpas a todos vosotros, a la autora y a la editorial pues en este caso la imagen ha tenido que ser creada con IA. Prometo en breve poner fotografía del libro sacada por un servidor.
Más lo importante tal vez no es la imagen que ahora comparto sino el contenido del libro encuestión.
Hace ya mucho tiempo que leí "Non quero ser Doris Day" (buena lectura para leer un día como el Día das Letras Galegas), y puedo decir que la autora guste a los lectores más o menos en cuanto a la temática de la obra. No defrauda y consigue con ella que el lector debata respecto sino del tema central si de alguno de los temas secundarios que pueden resaltarse si uno lee con la calma que yo no he tenido.
Si, algunas veces tiene ese aire de tormentoso romanticismo como una suerte de texto compartido con Victor Hugo. Tal vez eso me pareció en esta novela como un cambio respecto a la que citaba previamente y que viene también dado por esa busqueda de la perfección de la forma narrativa, ese color local que el da a la historia y ese punto fogoso, inquieto y agitado que atrapa al ojo vagabundo del lector.
Cuando miro esta novela de Inma López Silva viene a mi mento la pelícual de Roberto Gavaldón "Noches de Ronda" y creo que se podría rodar de esta novela una pelñicula o serie con ese mismo tono pues es como se representaban en mi mente escenas, diálogos, paisajes.
"Memorias de Cuidades sen Luz" también es buena lectura en el entorno del Día das Letras Galegas pues tiene ese realismo dramático que uno percibe en la narrativa de esa canción de Juan Pardo que hablaba de una gaviota perdida que se entrebaga agotada en su barco, en la cubierta, y que trás mirarse mutuamente la gaviota partía en vuelo nuevamente. Así somos los lectores en esta novela, gaviotas que se posan en la historia que Inma López Silva nos narra, reposamos en ella, la miramos y después al terminarla emprendemos nuevo vuelo. Tal vez para volver a encontrala o para hablar de ella con otros lectores potenciales en diversos ámbitos que también son gaviotas.
Os invito a leerla, creo que estamos ante una obra de líneas tan sólidas como suaves, intensas y expresivas a nivel narrativo y hasta cierto punto con un exostimo que atrae tanto como el Jardín Nazarí en Velez de Benaudalla (Granada),