Creo que está es una novela potente, estremecedora, cuya fuerza descriptiva puede asustar hasta al lector más valiente. La razón es que no toda la gente es capaz de soportar lo que el autor nos va relatando con una sangre fría que hace que el lector piense sin no es el propio autor un asesino en serie en ciernes. La verdad es que parece que el autor siente en la descripción el placer del asesino, y eso llamaría la atención de cualquier analista de perfiles.
Por otro lado es una novela muy intensa, capaz de dejar al lector fuera de sí. Una novela que sólo pueden soportar aquellos lectores cuya oscuridad interior es muy fuerte o lectores cuya fuerza moral sea inquebrantable. Y, aun así, no deja indiferente.
Por otro lado, la obra podría general cierto recelo por parte de algunos lectores. Sin embargo, se suple con una capacidad de hacer que el lector participe activamente en la obra de forma totalmente mental.
Creo que la obra merece una relectura y un comentario más extenso, posiblemente una ampliación de este comentario, que pondré en próximas fechas.
No puedo recomendar a todo el mundo la lectura de esta obra, pero animo a los que tengan es suficiente valor, el suficiente coraje, a tratar de de hacerlo, a intentar leerla. Si logran terminarla seguro que nos les decepcionara.
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